Como cada 8 de abril, hoy queremos continuar visibilizando los deseos de reconocimiento del Pueblo Gitano y el recuerdo a sus víctimas a lo largo de la historia.
Este año, en la conmemoración del Día del Pueblo Gitano, no podemos olvidar la grave situación que están viviendo las familias gitanas en Ucrania y, en especial, mujeres, niños y niñas por la devastadora guerra que están sufriendo.
Hoy queremos acordarnos de la población ucraniana y, en especial, de los gitanos y las gitanas de Ucrania, hermanos y hermanas nuestros, que requieren de todo nuestro apoyo y solidaridad. Nuestra pequeña aportación, por pequeña que sea, puede ser muy significativa, sobre todo cuando se trata de situaciones tan terribles como es una guerra.
Según han denunciado algunas organizaciones que se encuentran, nunca mejor dicho, al pie del cañón, la solidaridad no está llegando de igual manera a los ciudadanos en situación de mayor vulnerabilidad, entre ellos muchas personas gitanas.
Además, se han detectado situaciones de discriminación y antigitanismo, encontrando obstáculos para poder atravesar las fronteras hacia países limítrofes, o en el trato que reciben una vez que han logrado atravesar las fronteras: uso de perfiles étnicos discriminatorios por parte de policía de fronteras, segregación en centros de acogida y peores condiciones que las personas refugiadas no gitanas, o incluso casos como los reportados desde Hungría, donde se da menos comida a las niñas y niños gitanos que a quienes no lo son.
Hoy, 8 de abril, nuestra solidaridad, nuestra phenjalipén, que así es como se dice en romanó, el idioma gitano, debe hacerse notar más que nunca y debe llegar hasta las personas más necesitadas. Que nuestra solidaridad con las gitanas y los gitanos de Ucrania sea nuestra forma de reivindicar y conmemorar este Día Internacional del Pueblo Gitano.
El 8 de abril es una fecha en la que los gitanos y las gitanas celebramos la unidad de nuestro pueblo, porque nos une una historia compartida y una serie de valores que nos hacen alzar la voz ante situaciones de injusticia y desigualdad social que nos afectan. Por ello, queremos hacer un llamamiento a la Unión Europea y al Consejo de Europa, a las organizaciones de la sociedad civil y a la comunidad internacional en general, para que velen para que nadie se quede atrás en una sociedad tan fracturada como la provoca una guerra de estas dimensiones.
Tenemos que reforzar nuestro trabajo para contribuir a la reducción de las desventajas sociales y la discriminación que todavía gran parte de las personas gitanas sufren en nuestro país. El contexto actual, con la reciente aprobación de la nueva Estrategia Nacional para la Igualdad, la Inclusión y la Participación de la Población Gitana, la puesta en marcha en el Congreso de la Subcomisión para un Pacto de Estado contra el Antigitanismo y la Inclusión del Pueblo Gitano, así como la presencia de tres diputados y diputadas gitanos, genera una oportunidad inmejorable para que la sociedad española sea más inclusiva y respetuosa con los Derechos Humanos de todas las personas.
"Quien más tenga que más ponga" es una frase muy utilizada entre gitanos y gitanas, y simboliza que hoy, más que nunca, debemos ejercer nuestra phenjalipén, nuestra solidaridad gitana, con las personas que peor lo están pasando. Situaciones como las que nos recuerda este extracto del himno gitano, "Gelem, Gelem", que tristemente se siguen repitiendo:
"Anduve, anduve, por largos caminos.
Encontré afortunados gitanos,
Ay, gitanos, ¿de dónde venís,
con las tiendas y los niños hambrientos?"
Sastipen thaj mestipen - Salud y Libertad
Opre Roma! ¡Arriba Pueblo Gitano!